El CECOVA pide que se resuelva la situación de las enfermeras en el manejo de medicamentos peligrosos

El Consejo de Enfermería de la Comunidad Valenciana (CECOVA) ha presentado por Registro en la Conselleria de Sanidad Universal y Salud Pública una carta dirigida a la consellera Carmen Montón para reclamar que se resuelva la alarmante situación en la que se encuentran las enfermeras del sistema sanitario autonómico frente a la falta de medidas de seguridad suficientes para el manejo de los medicamentos peligrosos fuera de las áreas protegidas de Farmacia. El reciente caso del expediente a las enfermeras del Hospital Clínico de Valencia, una de ellas embarazada, ha provocado que esta grave precariedad haya saltado a la primera plana de los medios de comunicación y esperamos que con ello finalmente la Administración reaccione y resuelva.

Dado que la prevención de riesgos en el trabajo es un derecho de los trabajadores y que recientemente se ha actualizado por el Consell en el Acuerdo de 24 de marzo de 2017, por el que se aprueba el Plan de prevención de riesgos laborales de la Administración de la Generalitat Valenciana, no se puede admitir el desamparo al que se somete a los profesionales de Enfermería.

Existe un protocolo sobre medicamentos peligrosos aprobado por la Conselleria en 2016, actualizado dos veces pero que deja campo abierto a que con la variable “situaciones de urgencia” finalmente se justifique el manejo continuo de estos fármacos fuera de las salas blancas sin las medidas de seguridad mínimas. Ahora, con los expedientes abiertos por el caso del Clínico, las enfermeras además de temer por su seguridad deben valorar las consecuencias que puede tener en su expediente y en su salario el negarse a manejar estos medicamentos.

Por ello desde el CECOVA se insta a la Conselleria en dicha misiva a que se invierta todo lo necesario para eliminar el riesgo, adecuando las medidas de seguridad tanto dentro como fuera de las áreas de Farmacia, y que la regla general sea la preparación de medicamentos peligrosos exclusivamente dentro de ellas. Entendiendo que se pueden producir situaciones de urgencia vital que no admitan espera para su preparación, reclamamos una definición clara en el protocolo para que estos casos sean excepcionales, siempre de forma justificada y cuando no haya alternativa terapéutica para su uso.

Esperamos recibir una respuesta satisfactoria para los profesionales de Enfermería, ya que consideramos que estos ajustes acuciantes en materia de seguridad beneficiarán al conjunto del sistema sanitario de la Comunidad Valenciana y, en particular, a los propios pacientes que no estarán sometidos a la incertidumbre de recibir o no los tratamientos necesarios en cada momento.